jueves, 28 de junio de 2012

La psicología del color

La importancia del color está contemplada en todas las distintas culturas y ciencias, desde las más ancestrales hasta las más vanguardistas, teniéndolo siempre presente, como algo vital e inseparable.

Hoy en día, numerosos estudios avalan la influencia decisiva que tiene el color en el estado de ánimo de quien lo percibe (color terapia).

En los proyectos de decoración, el sistema de identificación de colores se hace a través del Pantone. Esta tabla muestra una serie de colores, con sus códigos, y se utiliza para localizarlos con precisión.

                                            

En este glosario me he basado, evidentemente, en la cultura occidental.

  • Azul
Incita al reposo, reduce la tensión y el estrés, ideal para oficinas o locales donde se suelen provocar conflictos. Traslada a la vida intelectual interior. Cuanto más se oscurece, puede llegar a resultar deprimente, cuanto más claro es menos sobrecogedor. Junto al blanco provoca sensación de higiene. Se puede equilibrar con toques cálidos de melocotón y rojo que reduzcan su efecto frío.

  • Blanco
Color positivo, sugiere pureza, inocencia, lo inasequible y lo incomprensible. Exige mayores superficies, creando impresión de vida y de infinito. Proporciona un gran telón de fondo, pues dirige la atención hacia otras cosas. En demasía produce incomodidad y desequilibrio, ansiedad y vacío interior. Es adecuado para un vestíbulo o un pasillo. Los blancos rotos (crema, hueso) crean ambientes más cómodos y habitables.

  • Negro
Oscuro y compacto, símbolo de la angustia, con carácter impenetrable. Es la negación del color. Cuando es brillante confiere nobleza, elegancia y distinción. Es útil para provocar contrastes. Puede emplearse para crear fondos llamativos, jamás para habitaciones infantiles o comedores.

  • Gris
Es un color ambiguo, asociado a la transición, pues posee las propiedades del blanco y del negro. Es compromiso y armonía. Puede constituir un fondo neutro ideal para cualquier estancia. Debe mantenerse en buen estado. Si se torna sombrío, está relacionado con la depresión.

  • Marrón
Impresión de compacto y de gran utilidad. Es el color más realista que existe, no es vulgar ni brutal. Encarna la vida sana. No recomendable para personas mayores ya que se relaciona con el otoño.

  • Rojo
Provoca fuerte atracción pues parece acercar los objetos. Significa alegría de vivir, calidez, la actividad, la fuerza, el movimiento, la pasión. Es positivo para el sistema nervioso y la actividad muscular, lo que le convierte oportuno para lugares de recreo y diversión. En exceso empuja a la violencia.

  • Amarillo
Aconsejable para salas de estudio, por ser un color creativo y mental, dispone a la concentración, acompañado con su complementario, el violeta, o alguno cercano como el azul. Se asocia a la longevidad, la alegría y la inteligencia. Es un color estimulante.

  • Naranja
Se relaciona con la salud y la vitalidad, el entusiasmo y el optimismo. La mezcla que posee de rojo le hace recomendable en la cocina y comedor, pues estimula el apetito. Es cálido, acogedor e íntimo. Posee una gran energía y espontaneidad. Especialmente indiciado para salas donde se precise la comunicación pues es el color de la sociabilidad, aunque no debe usarse en demasía.

  • Rosa
Se asocia al femenino. Idóneo para niños, convalecientes, con insomnio, pues tiene propiedades curativas. Posee cualidades sedantes, por lo que es adecuado para lugares que necesiten serenidad. Elimina el mal humor y crea un ambiente de comprensión.

  • Verde
Refrescante, tolerante, beneficioso para la vista y para la mente, recomendable para las salas de descanso. En dosis excesivas crea irritación y tensión. Reduce la fiebre, favorece el sueño y el reposo. Da tranquilidad y reserva, despierta la curiosidad y la imaginación.

  • Violeta
Tono espiritual que estimula la intuición. Provoca la risa y es conveniente en los grandes estados de cambio, como la pubertad y la menopausia, porque mejora el sistema endocrino. Como fusión del rojo y el azul, representa el conflicto entre el impulso y la calma, el dominio y la sumisión. Es misterioso, melancólico, mágico, pleno de dignidad.

  • Púrpura
Asociado con la introspección, la claridad, los rituales, la dignidad y el sentido de la oportunidad. Es espiritual por lo que es ideal para lugares dedicados a la meditación. Un tono oscuro crea un ambiente muy tranquilo en los dormitorios y añade grandeza a los salones.



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